La nueva gasolinera de la fundacion Aida da empleo a 13 discapacitados.

Surtidores, túnel de lavado y tienda conforman la

estación de servicio que lleva dos días abierta en el

polígono de Villalonquéjar, entre las calles Condado

de Treviño y Quintanadueñas.

 

Alberto Rodrigo, C. M. / Burgos    07/08/2010

La Fundación Aida sigue dando pasos para lograr la integración de las personas con discapacidad. A las dos gasolineras (en la calle Islas Baleares y Quintanilla Sobresierra) y un centro de lavado en las naves Taglosa que gestiona, se suma ahora una nueva estación de servicio en polígono de Villalonquéjar que da empleo a 13 discapacitados.
La nueva gasolinera, ubicada entre las calles Condado de Treviño y carretera de Quintanadueñas, lleva dos días abierta y funciona de manera similar a la de Islas Baleares, con atención de 6 a 23 horas y autoservicio a partir de las 23 horas. Surtidores, túnel de lavado, aspiradores y tienda son los servicios que se ofrecen a los clientes.
Los trabajadores han sido seleccionados a través de los currículum recibidos en la Fundación Aida y mediante contactos con varias asociaciones de discapacitados. Posteriormente han tenido que seguir unos cursos de formación. Los empleados tienen entre 18 y 61 años y los contratos son indefinidos aunque con un periodo de prueba.
Los copresidentes de la Fundación Aida, Pedro Pampliega y Juan Carlos García, subrayaron la importancia de fomentar la inserción laboral de las personas con alguna discapacidad. Las tres estaciones de servicio y el centro de lavado dan empleo a medio centenar de personas. «En la estación de Islas Baleares comenzaron a trabajar 15 personas, al año de funcionar había 20 y ahora son 25. En la de Villalonquéjar se podría llegar a 20 personas en un año».
La Fundación Aida no se amedrenta ni en tiempos de crisis porque es consciente de la ayuda que necesita este colectivo. «Es el último que se coloca cuando la economía va bien y es el primero que se va a la calle cuando la economía va mal. Mientras la economía iba bien y no había prácticamente paro, en el colectivo con discapacidad el desempleo estaba en torno al 25%. Es el momento de apostar por el empleo de estas personas. La Fundación Aida ha demostrado que los trabajadores discapacitados son trabajadores de calidad», añadió García.
En este sentido, destacan la situación estratégica que tiene la nueva gasolinera. «Será una de las principales entradas al polígono cuando abra el vial y la calle Condado de Treviño se conecte con la carretera de Santander».
A diferencia de la estación de Islas Baleares, que se levantó sobre un solar de titularidad municipal, la de Villalonquéjar se ha construido sobre suelo privado y con Cepsa como concesionaria, pero con gestión dependiente de la Fundación Aida.

Retroalimentación

La Fundación Aida destina todos los beneficios que obtiene por sus proyectos a crear más empleo para personas con discapacidad. «El buen funcionamiento de la gasolinera de Islas Baleares nos ha permitido abrir la estación de Quintanilla Sobresierra, con cuatro trabajadores, el centro de lavado de Tablosa y la gasolinera de Villalonquéjar», indicaron.
La tienda de la nueva estación de Villonquéjar ofrecerá pan y bollería pensando en los miles de trabajadores que cada día trabajan en el polígono industrial.